jueves, 3 de abril de 2014

El mismo tema de siempre.

Esta no es una entrada como las demás que he escrito, pero necesito decir algo.
Necesito tratar un tema, que quien me conoce, sabe perfectamente lo que me molesta hablar de esto, pero hoy, hablando con Ed (@AwayRecovery), ha vuelto a mi mente.

Os voy a hablar de los cerrados de mente de siempre, de esas personas que tienen que ver para creer que algo es posible, de esas personas que no ven más allá de sus cráneos vacíos.

La gente no cree que te puedas enamorar de alguien que nunca has visto, o que puedas llegar a querer en la distancia y me pregunto... ¿vosotros sí?

Habláis los que os tiráis dos días sin ver a vuestra pareja y se os cae el mundo encima, ya estáis con el 'le echo de menos' en la boca, ¿sabéis que os digo? No tenéis ni idea de lo que significa echar de menos a tu pareja, de pasarte meses y meses sin verla y acabar llorando noche tras noche por desear atravesar la pantalla del ordenador mientras hacéis Skype, habláis por WhatsApp o leéis un tweet de 'Te necesito aquí'.

No sabéis la rabia que supone no poder estar con esa persona cada vez que te necesita para un abrazo, un apoyo, un... me da igual, un simple beso. Da mucha rabia tener que conformarse con una llamada, un mensaje o una videollamada (en el mejor de los casos).

Pero que aún así, aun necesitando todo eso... (sus besos, caricias, abrazos.. verle) que esa persona sepa animarte, subirte la moral, sacarte una sonrisa de gilipollas mirando al móvil, eso, eso merece la pena. Porque existe gente que se pasa días y días contigo, y no es capaz de conseguirlo.

Además, cuando llega el día que vuelves a verla o que la ves por primera vez, que la noche antes no puedes pegar ojo, que estas de los nervios, saltas sin razón, sonríes hasta a los cuadros, bailas con los árboles de la calle y cuentas las horas, minutos y segundos que te quedan para poder dar el abrazo más tierno, real y mágico de todos.
Eso, es increíble.

Por experiencia, las relaciones a distancia son difíciles, cuestan mucho, y la verdad, es que acaban quemando con el tiempo. Pero poder se puede, si dos personas se quieren... ¿Qué más da lo demás?
Llegará el día que si puedas pasarte días y días con tu pareja, ir al cine, comer en los mejores restaurantes, ir a las cenas de empresa, hacer todo juntos. Pero hasta el momento, somos demasiado jóvenes y esa vida... aún queda lejos.

Pero a todos los que tengáis ahora mismo una relación a distancia deciros que sois muy valientes de luchar contra los kilómetros que te separan de esa persona. Que paséis de todo aquel que quiera separaros, que os quiten las ilusiones, o que os diga que 'hay que ser realistas'. Demostrarles que no tienen ni idea.


Y diría muchas más cosas, pero debería de estar estudiando.

miércoles, 2 de abril de 2014

La cima está lejos, pero llegaré.

Y hoy volviste a aparecer
con esa cara de ángel.
Sin saber que yo, 
una vez, estuve en el infierno
y conozco al demonio.
Ese mismo demonio que
escondes tras esa careta.

Apareciste pidiendo perdón,
diciendo las mismas palabras,
vacías, como siempre.
Llenas de promesas rotas,
promesas que nunca cumplirás.
Que me llenan de ilusiones,
de sueños,
de esperanza.
Pero que son simples palabras
que salen de tu boca.

Volviste para hacer daño,
para hacerme recordar,
porque te mata verme bien
y ver que puedo sin ti.
Que puedo continuar mi camino,
y llegar a lo más alto.

La cima está lejos,
y cada vez llevo más carga encima,
llevo todas las piedras que me fui encontrando,
llevo todos los recuerdos que duelen,
llevo todas las esperanzas rotas,
llevo mucho dolor.

Pero llevo también alegrías,
confianza en mí mismo,
sueños que nadie me quitará,
llevo familia, amigos,
personas muy importantes para mi
por los que daría mi misma vida.
Porque esa es la gente que,
cada día que pasa,
me demuestra que puedo.

No te molestes en intentar verme caer,
porque ellos no lo permitirán,
ellos de verdad cumplen lo que prometen.
Hoy te diré algo,
hay trenes que sólo pasan una vez,
el mío pasó varias veces para ti,
pero llevaba demasiada velocidad.
Y hoy en día, nadie está dispuesto
a arriesgar su vida saltando a las vías.

Pero...
¿Qué es la vida sin riesgo?
¿Qué es la vida sin aventura?
¿Qué es la vida sin velocidad?
Las cosas fáciles aburren,
pero lo difícil pocos lo aguantan.

Hoy vaciaré todo lo malo de mi mochila,
todos los recuerdos, promesas y palabras
que me hacen difícil continuar.
Dejaré espacio para alguien que
esté dispuesto a saltar a las vías
de acompañarme a la cima.
Y allí arriba,
Reírnos de todo lo que un día,

tanto daño nos hizo.

'Un tulipán no trata de impresionar a nadie.
No se esfuerza en ser diferente de una rosa.
No tiene que hacerlo. Es diferente.
Y hay sitio en el jardín para cada una de las flores.'
- Marianne Williamson -

martes, 1 de abril de 2014

'La felicidad es interior, no exterior;
por lo tanto, no depende de lo que
tenemos, sino de lo que somos.'
- Henry Van Dyke -

¿Llegaremos algún día a conseguir la felicidad eterna?
Sinceramente, no creo que exista. Siempre habrá algo en tu vida
que haga que las cosas no sean del todo buenas.
La vida es como el tiempo, sí.
Unas veces sol, y otras lluvia. 
A veces calma, otras tormenta.
Días de bermudas, manga corta y gorra.
Días de botas, abrigo y paraguas.
Días de calor, días de frío.
Pero al fin y al cabo, sólo días.
Días que pasan y aquí seguimos
buscando la felicidad eterna.
La manera de huir de los problemas,
de toda esta mierda.
De esta sociedad que cada vez va a peor.
Que cada vez tiene menos en cuenta el interior.
Cegados por estereotipos perfectos.
Por físicos de infarto.
Cuando no tienen ni idea de lo que nuestro interior esconde.
Pero seguimos ilusionándonos con que mañana cambiará todo.
Pensando que después de la tormenta viene la calma.
Pero en la vida, pocos días sale el sol.
Pocos días vuelves a casa con una sonrisa.
Cuando llega la noche y todo se te viene encima.
Cuando vienen los recuerdos, 
las palabras que un día dijiste,
o que por el contrario, callaste.
Cuando vienen esas risas que no volverás a escuchar,
esas miradas que no volverán a ser tuyas,
esos abrazos que te llevaban a lo más alto,
y esos besos cuyo dueño ya no eres tú.
Miles de noches comiendo techo.
Miles de noches llorando,
incluso sin tener motivos,
sin un porqué.
Porque ya nos afecta tanto todo 
que a la mínima caemos.
Pero cariño, recuerda esos días de sol
donde la felicidad eterna parecía estar cerca.
Donde la tormenta se veía tan lejos.
Recuerda que una vez te hice feliz.

'Sonríe, porque recuerda que
aunque el cielo esté lleno de nubes
el sol siempre estará ahí.
Sólo tienes que mirar en tu interior.'


Abril empieza,
entre lluvias y tormentas.
Recordándonos que aún en primavera,
el frío y la oscuridad siguen aquí.
Pasan meses, estaciones, años...
Pero nada cambia.

Nos dicen que crecer significa madurar, crecer como personas.
Pero no quiero.
Quiero volver a ser ese niño alegre lleno de cicatrices por jugar en el parque, y no cicatrices del dolor que nos causan las desilusiones.
Ese niño al que tenían que coger en brazos para pedir chucherías, y no porque estás hundido sin poder levantar.
Ese niño que miraba debajo de la cama por si el malo de los dibujos aparecía, y ahora saber que los malos ya no salen sólo en las películas.
Ese niño que utilizaba las sábanas como si de un escudo de hierro se tratase, y ver que ni el escudo más fuerte puede evitarte el dolor.
Y un niño cuya mayor preocupación era no salirse de la línea coloreando, o conseguir todos los cromos de los álbumes.

No quiero crecer, no quiero madurar.
Porque hoy en día ya no contamos años, si no daños.
Ya no celebramos victorias, simplemente nos conformamos con que algún día alguien nos saque una sonrisa, y sea de verdad.
Aunque sepamos que esa sonrisa durará poco.
No se cual será la solución a tantos problemas, sólo se que la vida no es justa con las personas buenas.

Pero confío en que todo pase.
Como los años, estaciones, meses...
Como este mes de Abril.

Sólo espero que nunca olvides mi nombre.

Otro día más aquí.
En este infierno sin ti.
Quemando cada uno de tus recuerdos.
Esos que están grabados con fuego.
Esos que cuestan tanto olvidar.
Llegaste y dijiste que arrasarías con todo.
Y así fue.
Pero nunca lo imaginé de esta forma.
Nunca imaginé que acabaría tan vacío sin ti.
Nunca imaginé verte en otros brazos.
Ni tampoco rozando otros labios.
Porque yo tenía claro que eras tú o nadie.
Pero volví a fallar.
Fue otro más de tus sucios juegos.
Y caí como un completo gilipollas.

<Sólo espero que nunca olvides mi nombre>
'¿Amigos? Los hay buenos y no tan buenos.
Los hay para un rato y para toda la vida.
Los hay sinceros y un tanto falsos.
Pero hablaré de los de verdad, 
de esos que no se van por mucho
que las cosas se pongan feas.
De esos que sin apenas verte,
saben como estás.
Y los que con un simple abrazo
es imposible que no se te salten las lágrimas.
Con esos que cometes las mayores
locuras y estupideces.
Con los que ríes, cantas y lloras.
Los que saben guardar secretos,
decir verdades aunque duelan 
y levantarte de cada caída.
No envidio a nadie, 
porque estoy seguro que
los mejores amigos los tengo yo.'

Gracias.

Déjame ser cada uno de tus cinco sentidos.

Déjame ser esos ojos que te vean crecer.
que se pierdan con tu mirada.
déjame ser la nariz que huela tu perfume,
y ese olor a palomitas de la penúltima fila
en el cine.
Déjame ser es boca que te come a besos,
que muerde tus labios y
no se cansa de decir 'te quiero'.
Déjame ser esas orejas a las que susurras,
a las que te acercas
para ponerme los pelos de punta.
déjame ser esa piel que roza con la tuya,
que toca cada milímetro de tu piel.

<Déjame ser cada uno de tus cinco sentidos>